Nacho Royo / Héroes del Silencio

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Bueno, os debía la explicación de quien es Nacho Royo.
Os advertí de que sería largo… y lo es.
Me ha llevado varios días escribirlo, pero no me importa. Deseaba hacerlo porque es un poco como el “cuaderno de bitácora” de Kuliflò&Xes para el recuerdo porque, si de algo estoy segura, es de que todo lo que llevamos vivido a costa de esto no lo olvidaremos en la vida.

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A finales de 1996 acababa el sueño de Héroes del Silencio y con ellos los de muchos que les seguíamos de cerca, a pesar de no hacer “ojos ciegos” a su decadencia, y no a nivel musical sino personal.

Terminó de repente, tan de repente que nos negábamos a creerlo… y no de la mejor manera.

El grupo que Juan Valdivia creara a mediados de los 80, nos dijo adiós irrevocablemente.
Diferencias de opinión entre los miembros del grupo, deseos de hacer otras cosas, la lesión de uno de sus componentes, la carrera en solitario con la que soñaba alguno de ellos… La suma de muchas cosas, pequeñas y grandes.
Nos dejaron mal sabor de boca. Amargo, muy amargo porque además no se despidieron como nos habría gustado.

A pesar de todo, sus canciones han seguido sonando siempre en la radio, en nuestras casas, en nuestros coches y por supuesto en nuestros corazones.
Fruto de ello es la increíble cantidad de adolescentes que a día de hoy se declaran fans. Jóvenes que aún no habían nacido o que andaban con biberón y pañales.

El verano del pasado 2006 empezaron los rumores de una posible vuelta a los escenarios, rumor que se vio reforzado por las declaraciones del alcalde de un pequeño pueblo de Zaragoza que afirmaba rotundamente que los Héroes del Silencio estaban ensayando en el polideportivo de su población.
Pobre loco… un alcalde ha de promocionar a su pueblo a cualquier precio…

A la par, la discográfica EMI nos seguía sorprendiendo con la reedición de todos sus discos y un especial Platinum Collection compuesto por un triple CD y un DVD de videoclips y actuaciones en directo.

Y empiezas a pensar… Cuando el río suena, agua lleva… Y si…?
Pero no, eso no era posible. Ellos siempre se habían negado. Cada uno había tomado su camino.

Es curioso pero, precisamente el verano del año pasado el único CD que sonó en mi coche durante todas las vacaciones fue uno de Pop-rock español en el cual tengo incluidos los temas de Héroes que más me gustan. Héroes fue la banda sonora de mis vacaciones y a la vuelta me encontré con los rumores… Que cosas tiene la vida!

Gracias a ese CD, mi sobrina Núria alias Kuliflò, que por aquel entonces contaba con 12 años (casi 13), descubrió a grupos como Los Secretos, Revolver, y por supuesto Héroes. Recuerdo un viaje a Tarragona en el cual la estuve machacando todo el camino. Apuesta por el rock’n’roll (que aunque la cante Bunbury no es de Héroes del Silencio, sino de Más Birras) fue la primera que “le entró”. Empezó a interesarse por ellos y de rebote por Enrique Bunbury. En pocos meses se sabía todas sus canciones, era capaz de tocar acordes y me hablaba de cosas relacionadas con su carrera que yo desconocía por completo.
Empecé a acojonarme…

Y los rumores continuaban, cada vez con más cuerpo y detalles, hasta que…

Eran las 06:42 de la madrugada del 15 de febrero cuando el aviso de recepción de un sms en mi móvil me hizo temblar del susto. A esas horas y en día laborable, no podía ser nada bueno.
Cuando fui capaz de acertar con las teclas para poder leerlo, me desperté de golpe. El sms era de mi sobrina Núria. Me lo enviaba desde el tren, camino del colegio.

Traduzco literalmente del catalán y de ese extraño lenguaje sin nombre que se usa para escribir sms (y que si tiene nombre, no lo conozco. Mil disculpas):

«Ei! Que vuelven los Héroes! Lo pone el periódico! El 12 de octubre en Zaragoza! Lo comunicaron ayer! Aiiissssss… ya podemos ir ahorrando! (en la foto del periódico sale muy guapo)*. Un beso y buenos días»
*Se refiere a Quique, Enrique Bunbury... Su amor platónico.

Dios!!! Menuda forma de despertarse!, No cada día te arrancan de los brazos de Morfeo para darte una noticia, y menos de ese calibre.
No podía creérmelo. El intercambio de sms fue… bueno, ¿qué puedo contar?. Recibí sms de toda la family, y yo que soy muy sentimental… Los tengo todos guardados!!!

Volvían pero sólo para 10 conciertos. 10 únicos conciertos.

La oportunidad de demostrar lo grandes que realmente són y despedirse de su público debidamente.

No siempre hay segundas oportunidades.

No paramos hasta averiguar cuando y donde se ponían las entradas a la venta.

A partir de las 00:00 del día 1 de marzo (noche de miércoles a jueves) se podrían adquirir por Internet, cajeros de Ibercaja y en algunas tiendas de discos, pero en las tiendas había poca disponibilidad.
Aunque Ibercaja no tiene muchas oficinas en nuestra tierra, optamos por el cajero automático, dado que en Mataró hay uno, y además es afortunado porque expide entradas.
Y llegó el día… A las 18:30, 4 personas ya se hallaban haciendo cola.
Núria y yo fuimos más pacientes y no fuimos hasta las 21:40.
Teníamos 9 personas delante, aunque en realidad eran 3. Íbamos a tener entrada seguro. Era imposible que no fuese así.
La cola fue creciendo. Todo el mundo estaba superemocionado esperando a que fuesen las 00:00.
Una chica, la primera de la fila, acompañada por el marido y una amiga, cubrió el cajero con varias estampas de la Pilarica. Dios, que nervios!!!

Y llegaron las 00:00, y las 00:20, y las 00:40… y de allí no salía una puta entrada.
Gente de la cola estaba en contacto vía móvil con amigos y familiares en otros puntos de España, y por ellos supimos que en el resto de cajeros del país estaban en la misma situación que nosotros.
Internet también se había bloqueado y no era posible adquirir las entradas.
En ningún momento perdimos la fe. En cuanto salía la leyenda de Operación anulada, se volvía a introducir la tarjeta y listos.

Emoción, anécdotas, coleguismo… todos unidos por una misma causa.

A las 02:00 fui a llevar a Núria a casa porque al día siguiente no sólo tenía cole, sino que además tenía exámenes. De camino al coche me dijo: “Mira, no sé si conseguiremos entrada para ir al concierto pero sólo por lo aquí vivido ya ha merecido la pena”. Y tenía razón.

Volví al cajero y aproximadamente a las 02:30, la primera chica de la fila, a la cual ya había abandonado el marido, consiguió sacar sus 4 entradas (el máximo permitido por tarjeta).
La que se formó no se puede explicar con palabras. Pagaría por tener la cinta de seguridad de ese día. La emoción y el griterío fueron brutales y los momentos que allí se vivieron irrepetibles.
Pero de nuevo no salieron entradas hasta pasada 1 hora y media.
El personal de la cola fue marchándose y sólo fuimos quedando los que estábamos de los primeros.
Se detenían coches en la puerta del cajero para preguntarnos si ahí sí que salían entradas. Gente que desesperadamente venían de Granollers, Blanes, Barcelona, Vic…
Alguien fue a una gasolinera cercana a por bebidas y algo que comer.
Los Mossos d’Esquadra pasaban por delante de la entidad, nos miraban allí tirados en el suelo de cháchara, pero en ningún momento se detuvieron.
Cuando me tocó a mí estaba hecha polvo. Eran las 4 de la mañana de un día laborable, posterior a otro laborable también.
Empecé con el mete-saca tarjeta y así me tiré más de 1 hora.
Yo sólo quería 2 entradas y la pareja de detrás de mí también, por lo que habíamos acordado de antemano que yo compraría las suyas o ellos las mías.
Harta ya de meter y sacar, le cedí el turno a mi siguiente en la fila.
Increíblemente el chico tuvo suerte y en pocos minutos, a las 05:33 para ser exactos, consiguió obtenerlas. Fui a un cajero cercano a sacar el dinero, le pagué en efectivo y respiré.
Por fin podíamos descansar tranquilos.
Las entradas eran roñosas, en papel de fax azul desvaído con bordes amarillentos, pero eran nuestro pasaporte para entrar en La Romareda el 12 de octubre. BIEN!!!

Sms para darle el notición a Núria, correr a casa para pegarme una duchita y… alah! Al trabajo! Pero con que buen humor!!!
Íbamos a estar el 12 de Octubre en el concierto del milenio!
No podía creérmelo. Debíamos esperar 7 meses… 226 días.

Esa misma mañana. Ibercaja suspendió la venta de entradas en cajeros e Internet. Los sistemas se habían colapsado y comunicaron que en unos días se pondrían a la venta a través de un número de teléfono.

Empezamos a soñar y a hacer planes. Nos haríamos camisetas para la ocasión, iríamos a la Estación del Silencio, aprovecharíamos el puente para, después del concierto, ir a Soria y a Burgos para visitar la catedral…

Pero a finales de junio nuestros sueños empezaron a quebrarse.
Núria leyó en un foro de Internet (universo Héroes) que las entradas debían validarse porque habían algunas que no eran correctas.

Fui a la oficina de Ibercaja de Mataró, la misma donde las adquirimos. Les pedí que me las validaran pero no tenían ni la más remota idea de lo que les estaba hablando. Les puse al corriente. Llamaron a la central, hablaron con uno, con otro, y al final, después de tenerme allí media hora esperando, me pidieron la tarjeta con la que las había adquirido. Les expliqué lo sucedido y me dijeron que “si no hay tarjeta, no hay validación”. No entendía nada. Le dije a la Sra. Directora que yo no conocía de nada a las personas que me habían hecho el favor y que mirase el registro de operaciones de esa noche (que no eran muchas, por no decir ninguna) y que, como consta en la entrada, la de las 05:33 era la realizada con esa tarjeta. La Sra. en cuestión se rió en mi cara y me dijo que eso era imposible. Tuve que conformarme con que hiciera unas fotocopias de las entradas y se anotara mi número de teléfono por si el chico en cuestión se pasaba por la oficina.

Dios mío! No habían hecho publicidad del incidente. Nosotras nos enteramos por pura casualidad. ¿Cuánta gente iba a encontrarse con que no podría entrar en La Romareda?

Fueron pasando los días y los nervios en aumento. Llamadas a la central de Ibercaja sin obtener ninguna respuesta más que portazos dado que lo calificaban de “reventa”. ¿Reventa?... y lo suyo ¿qué era?... ¿estafa?
Los rumores por los foros de Internet eran cada vez mayores. Muchas personas estaban como nosotras, sin saber si su entrada era buena o no. Unos decían que las de papel de fax no valían, otros decían que si en el papel había el símbolo de Ibercaja sí…
Hubo gente que escribió al Ministerio del Interior, pero no habían recibido respuesta.

En nuestra desesperación, el 7 de agosto Núria propuso escribirle un correo electrónico a Nacho Royo, manager de Enrique Bunbury, responsable de la vuelta de Héroes y coordinador de la gira. No deseaba pedirle intercesión, pero sí que estuviera al corriente de lo que estaba sucediendo y de la que se podía formar el día 12 en la entrada de La Romareda cuando hubiese gente que no pudiese entrar. Avalancha!.
Le comenté que no se ilusionase demasiado con el tema porque seguramente Nacho Royo ni siquiera leería el correo, pero no la desalenté ni mucho menos.

Lo transcribo a continuación:

----- Original Message -----
From: nÚria!
To: XXX

Sent: Tuesday, August 07, 2007 8:05 PM
Subject: acerca de las entradas para el concierto de Héroes del Silencio del 12 de octubre


Hola, buenos días,

Me llamo Núria Vila y tengo 13 años.
Me pongo en contacto con Ud. porque según he leído, es el manager de Héroes del Silencio, y me gustaría informarle de un problema que está sucediendo con las entradas para el concierto del día 12 de octubre en Zaragoza, por si no están al caso de lo que ocurre.

Como sabe, las entradas se empezaron a vender el día 1 de marzo a partir de las 00:00 de la noche, en tiendas y en cajeros de Ibercaja.
Yo estuve en el único cajero de Ibercaja que hay en Mataró, un pueblo que está a 30km de Barcelona, que es donde vivo.
Cuando fueron las 00:00, las entradas no salían, e iba pasando el tiempo y tampoco.
No había demasiada gente y debido a que no salían las entradas, aún fue quedando menos.

Yo me marché a las 2:00 de la madrugada, pues al día siguiente tenía que ir al colegio, pero allí se quedó mi tía, la persona con la que iré al concierto (o con la que iría si no hubiese pasado este problema que le voy a contar).

Me contó que alrededor de las 03:00 de la madrugada, los primeros de la cola consiguieron obtener las primeras entradas del cajero. Emoción y griterío.

Allí dentro, después de tantas horas de nervios y espera, se creó un ambiente amistoso, y, por supuesto, se ayudaron los unos a los otros a la hora de sacar las entradas.
Sólo salían entradas cada hora y media más o menos, a parte de que todas eran generales, pues las preferentes no estaban seleccionables.

Cuando le tocó a mi tía, después de intentarlo un montón de veces (más de 1 hora de meter y sacar tarjeta), le dijo al chico que tenía detrás que lo intentara él (ya que mi tía sólo quería 2 y él también 2) y que, si las podía sacar, le sacara las suyas y que ella le daba el dinero en efectivo.

Y así lo hizo. El chico tuvo suerte y a las 05:33 consiguió sacar las dos suyas y las dos nuestras, y luego ella le dio el dinero.

Al principio teníamos la sensación de que nos quedaríamos sin entradas, pero cuando ya las tuvo a la mano, vimos que aquel sueño se podía hacer realidad y que podríamos asistir a uno de los 10 conciertos que Héroes del Silencio darían en su Gira Mundial.
En junio o julio, no recuerdo bien, entré en el foro de universoheroes.com y vi que informaban de un problema con las entradas sacadas en los cajeros el día 1 de marzo.
Decían que podían tener algún defecto y que debíamos dorigirnos a una oficina de Ibercaja para que confirmaran su validez o para que nos las cambiaran.

Yo no sabía si era un rumor o si era cierto, pues ni en la web de Héroes del Silencio, ni en la de Enrique Bunbury, ni en la de Ibercaja, decían nada, y ya sabe Ud. que por los foros corren muchos rumores.
Bien, pues llamamos a Zaragoza y nos dijeron que sí, que nos teníamos que dirigir a una oficina para que nos las cambiasen si tenían algún problema. Y así lo hicimos.
Mi tía se dirigió a la oficina de Ibercaja donde sacamos las entradas.

Ya de entrada, ni la directora de ésta, ni los empleados sabían nada de todo esto, por lo que mi tía les tuvo que poner al corriente y explicarles lo que pasaba y lo que le habían dicho.
Llamaron a la central y la respuesta fue que dado que no tenemos la tarjeta con la que se efectuó la compra, no podemos hacer reclamación alguna.

Mi tía insistió en que mirasen el registro de operaciones de esa noche para averiguar el nº de tarjeta y de esta manera, o bien verificar las entradas, o bien intentar localizar al chico a través de su banco.
En las entradas pone la fecha y la hora en que fueron expedidas (la directora tampoco lo sabía; mi tía se lo tuvo que explicar). 200703010533, o lo que es lo mismo 05:33h del día 01/03/2007, pero la Sra. Directora se echó a reír, alegando que eso era imposible. Se limitó a fotocopiar las entradas, tomarle los datos y su número de teléfono, por si el chico en cuestión se presentaba en la oficina, y le dijo que ya la llamaría si había algo.

Han pasado 2 meses y no hemos recibido ninguna llamada.

Más tarde, después de esto, vi en el foro de Las Líneas del Kaos, club de fans oficial de Héroes del Silencio, que decían que las entradas en papel de fax sacadas en los cajeros el día 1 de marzo para el día 12 de octubre se tenían que cambiar por unas en cartulina, debido a la falsificación de las de papel de fax.
En el foro también se decía que se negaría el acceso al estadio de La Romareda a cualquier persona que llevara unas entradas en papel de fax.

Mi madre llamó a varios números de teléfono de Ibercaja para preguntar por la cuestión, y éstos le confirmaron que no podía cambiar las entradas porque no tenía la tarjeta con la que se habían obtenido. Le dijeron que nos pusiésemos en contacto con la persona titular de la tarjeta para que nos diese el nº de la misma. Pero claro, el problema es que a ese chico no lo conocemos de nada, y ni sabemos donde está.
También nos dijeron que esto lo habían hecho PARA EVITAR LA REVENTA… ¿Así se evita la reventa?

¿Y si por algún caso nos regalan las entradas?, ¿Y si el titular de la tarjeta ha cancelado la cuenta y ya no la tiene?, ¿Y si se ha muerto?... en 7 meses pueden pasar muchas cosas, ¿No?

Seguramente no seremos las únicas personas que nos ha ocurrido esto, incluso habrá muchas que no sabrán nada.
Si yo no hubiese entrado en los foros y no hubiese leído todo eso, nos presentaríamos en Zaragoza con las dos entradas en papel de fax, quizás erróneas y no nos dejarían entrar al concierto.
Y… pensad en la que se puede armar el día 12 en la entrada del estadio.
La que puede armar la gente que no se haya enterado (la gente se tomará a pecho lo que decía Enrique... AVALANCHA... eso es lo que puede suceder, una avalancha y un kaos total).

Sé que vosotros (Ud. y Héroes) no tenéis la culpa, sólo deseaba informaros de esta injusticia por parte de Ibercaja que suena a estafa y a tomadura de pelo, todo por hacerse cargo de algo para lo que no estaban preparados. Ahora los que pagamos su incompetencia somos los tontos ilusos que nos pasamos la noche del 1 de marzo en vela.

Cuando Héroes del Silencio se separaron yo apenas tenía 3 años, y que se vuelvan a juntar ahora (y sólo para la ocasión) a mí me ha hecho mucha ilusión, a mí y a muchísima gente de España y América. Era un sueño poder ir a verles, y ahora ya no sé si lo podré cumplir o no.

Ahora solo tengo una pregunta, y es ¿Nos quedamos sin concierto mi tía y yo?
Si no se soluciona, seguro que sí.
(Y por supuesto, ya ni hablamos de quien nos devuelve los 82,00€ de las entradas)

Muchas gracias por su atención y aprovecho para enviarle un saludo.
Atentamente,

Núria Vila

12 días después, el 19 de agosto, ya casi cuando ni recordaba el tema, un grito histérico de Núria me anunciaba que había recibido respuesta del Sr. Royo.

La respuesta era escueta pero contundente:

No te preocupes Nuria, te informaremos que debéis hacer, tienes mi palabra que acudirás al concierto.

La respuesta estaba enviada con copia al director de cultura del ayuntamiento de Zaragoza, a la responsable de imagen y marketing de ibercaja, y a otras personas que desconocemos.

Núria le respondió dándole las gracias por su atención y diciéndole que esperábamos sus noticias.

Al día siguiente, lunes 20, teníamos pensado desplazarnos hasta Barcelona para acudir a la oficina que Ibercaja tiene en Plaça Catalunya, a ver si allí teníamos más suerte. Y así lo hicimos a pesar del correo de Nacho.

Se repitió la misma escena que en Mataró: nadie sabía de qué estábamos hablando. Éramos como marcianas en misión conquistar la tierra.
La chica que nos atendió preguntó a sus compañeros, pero tampoco sabían nada. Llamó a la central por indicación nuestra y allí le dijeron que consultase el boletín del 24 de julio. Y la chica así lo hizo… y nos pidió la tarjeta… y otra vez tuvimos que soltar todo el rollo. Pero ésta, pareció comprendernos y apiadándose de nosotras, se lo tomó con más interés. Hizo fotocopias de las entradas y de nuestros DNI, nos tomó un teléfono de contacto y finalmente… se le ocurrió mirar las entradas a la luz de los rayos ultravioleta.
Las entradas, a pesar de ser roñosas, tienen estampado en su dorso el logo de Ibercaja, visible sólo a los rayos ultravioleta.
El papel era correcto. Las entradas no tenían porqué no ser válidas.

El problema que hay con algunas de las entradas es porque en algunos cajeros NO pusieron el papel adecuado y las entradas se imprimieron en papel normal de recibo, o lo que es lo mismo, Ibercaja cometió la negligencia de no poner el papel adecuado en sus cajeros y ahora somos los pobres incautos que pasamos la noche en vela para conseguir nuestra entrada los que tenemos que pagar los platos rotos… Esto es de juzgado de guardia!!!
Y la cosa era tan sencilla como MIRAR LAS ENTRADAS CON RAYOS ULTRAVIOLETA.
Y para eso te marean y te marean, haciendo que llames a un número de teléfono, más tarde a otro, luego a un tercero, pidiendo tarjetas, buscando excusas…

¿Tan sencillo?

Pues sí, tan sencillo porque para guinda, cuando llegamos a casa teníamos un correo electrónico del Responsable de Venta de Entradas de Ibercaja, comunicándonos que se había puesto en contacto con la oficina de Mataró y que habían podido comprobar que nuestras entradas eran correctas… Y sin tarjeta!!! Hay que ver!!!

Rápidamente escribimos a Nacho Royo (Cacho Pollo ya a estas alturas) para comunicárselo y para agradecerle que en 24h hubiera puesto fin a nuestra pesadilla.

Y nos respondió: Que lo disfruteis!

Alucinante Cacho Pollo!

Este hombre es increible...

Ya tenemos el diseño de las camisetas a punto de impresión, un fotolog con la cuenta atrás, el coche alquilado, el hotel reservado y unas ganas lokas de que llegue el día para salir zumbando de madrugada.

Estamos siguiendo la gira gracias al blog que Pablo Ferrer, el corresponsal del periódico Heraldo de Aragón actualiza a diario http://www.heraldo.es/especiales/entredostierras/
En Guatemala llevan 3 días montando el superescenario de 12x40m en el Estadio del Ejército, donde Héroes del Silencio estrenará gira el próximo sábado día 15.

Aún así seguimos un poco reticentes y hasta que no estemos dentro de La Romareda el 12 de Octubre a las 21:00, no estaremos tranquilas… bueno… tranquilas será imposible estarlo… bufff! Que nervios!!!

Gracias Nacho Royo, te queremos!!!

HDS FOREVER!!!